Durante años conté historias con imágenes. Hoy acompaño a otros a reconectar con la suya.
Sobre mí
Me llamo Roberto Pacurucu (1996) y durante más de 10 años trabajé como fotógrafo de moda, especializado en fotografía editorial, comercial y de retrato. Estudié en Fotodesign Chile y colaboré con marcas, diseñadores y modelos de distintas partes del mundo. Mi trabajo fue publicado en medios internacionales.
La fotografía fue, durante muchos años, mi forma de mirar, expresarme y sostenerme en el mundo. Empecé a hacer fotos a los 15, por intuición, sin presión, y con los años logré convertir esa pasión en un oficio. Tuve mi propio estudio, formé equipos de trabajo, viajé, crecí. Alcancé muchas de las metas que alguna vez soñé. Pero también empecé a notar que, por dentro, algo se empezaba a apagar.
Fue un cambio silencioso al principio: una sensación de desconexión que se volvía cada vez más difícil de ignorar. El entusiasmo que antes me guiaba ya no estaba. Bajé el ritmo, dejé de tomar encargos, y lancé Estudio Pacurucu con la intención de diversificarme y reencontrar motivación. Pero con el tiempo entendí que, aunque había cambiado la estructura, seguía en una dinámica que ya no me representaba.
Ese quiebre me obligó a mirar hacia adentro con más honestidad. No era la industria el problema, ni el entorno, ni siquiera los proyectos. Era simplemente que yo ya no quería seguir en ese lugar. Que mi energía estaba buscando otro espacio, otra forma de crear, otra forma de estar.

Ahí fue cuando reconecté con una parte de mí que venía trabajando hace años, desde que inicié mi propio camino terapéutico a los veintitantos. A lo largo de ese proceso entendí que nada de lo que logré profesionalmente hubiese sido posible sin el trabajo interno que sostuve durante todo este tiempo. Sanar, conocerme y volver a mí una y otra vez fue lo que me permitió avanzar, crecer y, sobre todo, transformar mi manera de ver el mundo.
Hoy estoy en proceso de formación como Coach Tanspersonal en la escuela Inner Key (España). Y todo lo que antes expresaba desde la imagen, hoy también lo canalizo a través del acompañamiento: escuchando, conteniendo, preguntando, caminando al lado.
Este espacio nace de esa transformación.
Un lugar donde lo visual y lo interior se cruzan. Donde lo creativo no es solo una forma de mostrar, sino de descubrir. Acompaño a personas creativas —o en búsqueda de su creatividad— a reconectar con su propósito, su mirada y su proceso.
Creo que crear desde el alma es posible.
Y que cuando nos atrevemos a mirar hacia adentro, todo lo demás encuentra su forma.